Monday, July 18, 2011

Agosto no es el mes para comprometernos... Y lo que queda de Julio mucho menos...

Tengo una amiga a quien nunca veo pero siempre leo... Una personita que aunque compartí muy poco con ella, Dios la puso en mi camino para inspirarme y darme la oportunidad de comprender que en cualquier momento de nuestras vidas, podemos reinventarnos y cambiar y mejorarnos a nosotros, hasta convertirnos en alguien de quien estemos orgullosos... Irene, este post te lo dedico a vos.

Hace tiempo este título ronda mi mente... Y es que hay tanto tras de él... Ahora es el tiempo de escribir algo acorde con lo mucho que significa para mí.

Un par de veces en mi corta vida he soñado con una persona para compartir el resto de mi vida, para tener hijos y ser feliz. Y un par de veces esto no ha resultado como lo pensé. Pero unas muchísimas veces he creído ser capaz de hacer cosas que a último momento no puedo, ya sea por falta de fuerzas, ánimo o voluntad...

Mi peor pecado es la falta de paciencia. Todo lo quiero ya, y planeo cosas a largo plazo, pero llega un punto en el que la espera realmente me desespera y simplemente no puedo estancarme en el qué será...

Así que he decidido reinventarme, dejar todo en manos de Dios, empezar de cero, con todas las fuerzas del mundo, para poder descubrirme realmente, para poder intentar experimentar con quien soy y con lo que quiero de mí.

Quiero soltar mis ataduras, soñar con un nuevo mundo en el que disfrute de mí misma, de lo que hago, de cada día. Quiero abrazar la vida y el placer de vivir... Y dejarme llevar.

Quiero volver a encontrar el gusto en cada momento y en cada sensación, y sentir. Sentir el aire en mi cara y ver el color en el ambiente.

Y quiero dejar de oír lo malo. Poner a funcionar el fascículo de Oort y tomar las notas musicales que adornan mi alrededor y escuchar únicamente lo que me pueda beneficiar, no las falsas promesas de un futuro mejor.

Quiero ver los hechos, los actos, las acciones que demuestren que en efecto hay interés.

Por eso no quiero un anillo, y mucho menos para mi cumpleaños. No sólo me parece de mal gusto, sino que no es el momento. Quiero alguien que me quiera por lo que soy, y en este momento no sé quién soy. Me siento como una hoja en blanco y quiero pintarme de muchos colores, hasta que quede pareja y me sienta feliz.

No quiero un compromiso porque los demás lo tienen. Quiero crear mi propia historia y que me respeten por lo que soy, que me amen intensamente, despacio y con ternura, con detalles, besos, caricias y pasión.

No quiero comprometerme con nadie, porque en este momento no puedo comprometerme ni siquiera conmigo misma. Y es que tampoco puedo hacerlo, no estoy lista para esa clase de responsabilidad, para decirme lo que quiero y cómo lo quiero. No. No es el momento, porque simplemente no lo sé.

Así que hoy me propuse cambiar. No quiero perder más mi tiempo, ni hacer perder el tiempo a nadie mas. Voy a dejar atrás el dolor y la angustia y voy a ser sincera conmigo misma.

Y si la nueva yo no me gusta, siempre lo puedo volver a intentar...

No comments:

Post a Comment